jueves, 25 de julio de 2024

Regreso

Si no me viste partir, no puedes asegurar mi regreso. Sin embargo, si a la lejanía me viste abandonar este pueblo de poetas sesudos, te lo confieso, yo tampoco me vi partir. Más allá de lo que aparezca al batir tus pestañas bien puestas, sobre los faros de mi existencia, reconozco que por ti partí. Para alcanzarte en el límite del cielo, allí donde las gaviotas intrépidas alzan el vuelo y compiten por su ansiado desvelo: ascender. Yo a veces siento que eso es lo que tú buscas, y me quedo a un ladito inhalando mi propio aliento, para sentime viva de nuevo. No sé, hay momentos en que la nada domina mi temperamento, y quiero atar con lazos trenzados nuestras manos, para que ya mas nada haya, solo el trato de encontrarte con el mismo acierto del que señalas mi regreso.