Si se tiene todo, se busca en lo profundo del mar y en lo oscuro del cielo,
en la brisa que arrastra los besos, en el perfume a incienso.
De allí, los cuentos se extinguen en la primera alborada, se van y callan,
se duermen en un prado de amapolas.
De allí, nada termina.
corto pero bonito =)
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